31 de enero de 2007
















Un único compromiso puede invertir
el natural transcurso del sentido común,
suponer un desaire a los deseos propios
o saturar el mercado diario de vergüenzas.
Una única aproximación al recelo
explica, sin embargo,
la condición desequilibrada de la conciencia,
un trayecto que equivoca puntos de vista
desde el convencimiento generoso
de estar practicando noblemente
el oficio de deshacer heridas
por medio de la conversión de intenciones
a un estado errante de ingenuidad
que sólo entrega el aliento
cuando puede respirar sin aire.

26 de enero de 2007
















Fracasar en los convencimientos
y no perder las ataduras,
mostrar finalmente
el lado siniestro de la bondad,
los cuartos oscuros de la contemplación,
la quietud ante el abrazo.
Y todo por improvisar una fe
que consuele en el despiste de lo sensato
y proteja de estos mismos comportamientos.

22 de enero de 2007
















En tiempos de mendicidad como éstos,
lo inmoral acostumbra a razonarse
desde la moralidad
en nombre de la libertad que censura
para que todas las voces
se escuchen al mismo tiempo
y sean iguales
ambición, calumnia y esperanza,
y nadie entienda a nadie.

18 de enero de 2007
















Trae el desprecio una erosión,
el de los arrepentimientos acabados
y las desconfianzas borrachas.
Es un matiz sin confianza,
preso de las concreciones,
armado con el impulso de la venganza,
cruel, voraz,
pesado como las cenizas futuras.
Es mejor escuchar otros señuelos
que de la materia hagan señales llamativas,
colores de los cuentos,
respiraciones de las servidumbres
con esa manera de encontrar desahucios
entre la maleza de los trastornos.